Todos sabemos que el estilo de la gente de la calle de Francia, Italia o Nueva York es especial, o por lo menos es algo que yo asumí hace mucho tiempo. Los hombres españoles todavía estáis a una distancia considerable para alcanzarles. Aunque si seguís así los pasos serán más grandes. No obstante, podemos encontrar diferencias entre unos y otros.
Por ejemplo, los neoyorkinos van genial vestidos, pero sin personalidad, eligen la ropa al ritmo de las últimas tendencias. Lo mismo que vemos en la pasarela lo encontraremos muy poco tiempo después en las avenidas de la «Gran Manzana». De manera que es difícil ir mal vestida si el conjunto es de Oscar de la Renta, de Alexander Mcqueen o Marc Jacobs.
Mientras que los parisinos guardan ese aire romántico que te envuelve cada vez que vas a su tierra. Son creadores de estilo, no hace falta ir de marcas mundialmente conocidas para llamar la atención. Van vestidos de ellos mismos. Con sus sombreros y sus abrigos paseando por el Arco del Triunfo.
Los italianos… ¡Bravisimos! Siguen las tendencias efusivamente, sin que les quiten personalidad. Ellos son unos locos de la moda desde hace tiempo, aunque ningún diseñador va a conseguir que pierdan ese aire de conquistador nato. Vestidos acorde a sus buenas maneras como podemos ver en la imagen. El abrigo camel cruzado es impresionante, claro que también la percha hace mucho y él ha elegido los complementos perfectos una bufanda y un gorro azul marino.
Con un vaquero y un abrigo lleno de estilo, este italiano, va con un look totalmente personal. Haciendo alarde de su masculinidad nos permite percatarnos de que sé que cuida y le gusta la moda. ¿Cómo?, muy sencillo, por como lleva los jeans. Unos pitillo un poco pesqueros que nos permiten ver las espectaculares botas de piel. Yo le pongo un diez.
Vía: The Sartorialist